Capitulo 6

By Unknown - 17:24



El sonido de mi móvil sonó para despertarme en medio de la oscuridad. Miré por la ventana de la gran habitación y me dí cuenta de que era temprano todavía para ir a clases, así que solo me senté en la cama y empecé a pensar en que iba a hacer. Era jueves, no tenía casi ganas de nada, solo quería que fuera sábado para irme de nuevo de la Academia. Estaba cansada, me dí una ducha despejándome algo y empecé a vestirme para prepararme ya que teníamos clase de canto dentro de media hora.
Empecé a escuchar música con mi iPod sumergiéndome en mi mundo y perdiéndome en él, quería desconectar de absolutamente todo que me rodeaba y no paraba de torturarme constantemente.

Para mi suerte las clases pasaron demasiado deprisa, tanto que ni siquiera me enteré de las horas. Se me habían pasado volando y eso en mí era raro. Siempre me aburría demasiado en las clases, pero hoy era diferente.
Caminaba por el gran pasillo de la Academia, mientras estaba perdida de nuevo en mi mundo, llevaba en mi propio universo toda la mañana, sin apenas enterarme de lo que pasaba a mí alrededor. Simplemente cada vez que escuchaba música me olvidaba de todo mí alrededor, dejando a mi mente vagar y vagar. Eso me hacía bien. Necesitaba estar, aunque al menos fuera unas horas, sin pensar en nada.

Miley: Estas distraída ____ -me dijo mientras me miraba y bebía sorbos e su refresco en la cafetería-
Tu: Si, es que estoy algo cansada. La clase de baile me dejo agotada –suspiré mientras bebía algo de agua-
Demi: Mañana es la fiesta chicas! –Dijo emocionada mientras llegaba y se sentaba con nosotras dos, sonriente-
Miley: Tengo ganas de que llegue mañana –sonrió mientras yo intenté esquivar sus miradas sabía perfectamente que me iban a decir-
Tu: Otra vez con esa… fiesta? –arqueé mi ceja sarcástica-
Demi: Si –rió divertida al ver mi expresión- Y tu vas a ir si o si, no te vas a librar de nosotras ____ -las dos se miraron mientras reían-
Tu: Esta bien, solo espero que pase rápido –asentí mientras miraba a mi alrededor-

Iba mirando al suelo atentamente mientras caminaba sola por el pasillo para justo subir a las habitaciones y tumbarme sobre mi cama, estaba cansada, no tenía ganas de comer, las chicas seguramente estarían allí con el resto de la gente. Pero yo decidí subir a mi habitación para estar tranquila. Al menos, en ese momento Bieber no me molestaría porque estaría comiendo seguramente, así no tendría que aguantar sus “ruiditos” en la habitación que estaba pegada a la nuestra. No me dí cuenta ni de que había tropezado con alguien al subir al pasillo que daba mi habitación.

-: Podrías mirar por donde vas Edison? –me dijo una voz femenina que venía de atrás. Mis cascos estaban ya recogidos en mi bolsa-
Tu: -me volteé para comprobar quien era y al verla mirándome de arriba abajo me dieron ganas de soltarle algún insulto- Lo siento Selena, no me di cuenta –contesté seria, dicho esto me volteé para abrir la habitación-
Justin: Con quien hablas Selena? –Dijo saliendo de la habitación y me miró atentamente mientras ponía una expresión de desagrado- Vaya Edison, yo pensaba que estabas en el establo con tus amigos los animales –dijo mirándome mientras Selena y el reían sin parar por la “gracia” que había hecho Bieber-
Tu: Vaya, yo pensaba que estabas con otra de tus *beep* en tu habitación pasando el rato, pero ya veo que llevaba razón –dije observando a Selena mientras ella puso expresión de ofendida mientras abría un poco su boca. Justin se molestó-

Dicho eso cerré la puerta de un portazo y me tumbe rápidamente en mi cama, dejándome caer sobre esta. Eran tan insoportables, ahora comprendía porque estaban juntos, no habría nadie que les aguantara. Cubrí con la almohada de la cama mi rostro mientras de mis ojos salían algunas lágrimas de rabia. No entendía porque estaba así y porque esas lágrimas tenían que salir, es decir, nunca me había pasado eso. Solo era que no tenía mi día y no estaba como para aguantar a personas tan *beep* como ellos dos. Era lo menos que tenía ganas hoy, de tratar con personas como ellos. Y para colmo el dolor de cabeza no cesaba de una maldita vez, notaba un zumbido fuerte cada unos pocos segundos retumbar en mi oído, era como si tuviera en mi cabeza un corazón. Apreté mas el almohadón sobre mi cabeza para que se pasara, pero poco a poco mis ojos se fueron cerrando mientras todo estaba oscuro y no escuchaba nada. Caí en un sueño profundo.

Abrí los ojos para encontrarme con una luz al final de la habitación, el balcón estaba completamente abierto dejando pasar una brisa muy agradable. Se estaba muy bien en ese momento sobre la cama mientras veía de lejos el cielo totalmente descubierto, serían más de las 7 de la tarde porque estaba algo más oscuro. Aunque todavía había luz, el sol ya se había escondido. Me levanté de allí, por la música que se escuchaba desde la otra habitación, seguramente era Justin y los malditos de sus amigos.

Miley: Vaya, hasta que por fin despiertas –se quedó mirándome desde una de las sillas del escritorio, estaba con el ordenador sobre la mesa-
Tu: Creo que dormí demasiado –me pasé la mano sobre mi cabeza mientras no podía evitar sonreír ante la mueca graciosa de Miley-
Miley: Si, desde la tarde hasta ahora que son… -miró el reloj de su MacBook- las 7 y media de la tarde
Tu: Luego igual no puedo dormir –reímos las dos mientras me levantaba- Necesito una ducha –entré al baño- Luego te veo

Me relajaba sentir el agua recorrer cada parte de mi cuerpo, se sentía tan bien sabiendo que no tenía prisas por ir a clase, ya que siempre me solía dar una ducha por la mañana. Salí de la ducha nada mas con una pequeña toalla rodeando mi cuerpo, dejaba ver perfectamente buena parte de mis piernas bronceadas. Miley escuchaba música ahora en su cama tumbada mientras Demi estaba haciendo unas cosas en la mesa donde estudiábamos y yo empecé a vestirme, después de secarme todo el cuerpo y el pelo.
Me puse una camiseta de tirantes, porque hacia mucho calor y unos jeans ajustado con unas converse. Otra vez la maldita música no me dejaba concentrarme en lo que leía, me levanté decidida de mi asiento y corrí hacia el balcón para observar que estaba Chaz tumbado sobre una gran hamaca y a su lado estaba Ryan.

Tu: Chaz! –grité para que el se estremeciera del susto, casi se le cae al suelo el iPod- Pueden bajar la música, no me dejan concentrarme! –Me quejé mientras los dos chicos se quedaban mirándome y por desgracia un chico salió de la habitación para mirarme atento con aires de superioridad-
Justin: Que pasa? –arqueó su ceja mientras me miraba, yo estaba molesta-
Tu: Puedes bajar la maldita música? No me deja concentrarme –le miré mientras el soltó una carcajada sarcástica-
Chaz: Bueno, yo creo que me voy a mi habitación. Necesito hablar con Jason –dijo escapando de la terraza. Parecía que supiera que íbamos a acabar discutiendo, y la verdad no se equivocaba- Nos vemos!
Ryan: Yo te acompaño Chaz –se levantaron los dos para desaparecer- Adiós Bro, nos vemos luego
Tu: Todavía sigo esperando tu respuesta Bieber –Justo en ese momento se escuchó el sonido de cómo se cerraba la puerta de la habitación de Justin. Arqueé una ceja, mirándole molesta-
Justin: De verdad te piensas que voy a bajar la música, Edison? –con tono sarcástico-
Tu: Porque no la ibas a bajar? –sin entender que demonios estaba diciendo y de que me estaba hablando-
Justin: Te crees que después de hacer que discutiera con Selena en la tarde, voy a bajar la música solo para que Edison leea tranquila? –con su tono sarcástico, que ya me estaba hartando-
Tu: Vaya, ni que no supiera tu Selena que la engañas cada vez que se te da la gana –solté una pequeña carcajada mientras le miraba como su expresión se tornaba a una de mas rabia. Su mandíbula se tensó y apretó un puño- Todo el mundo sabe que por tu habitación han pasado la mayoría de las chicas de la Academia, Bieber!
Justin: -soltó una pequeña risa, parecía que se sentía orgulloso de ello. No pude con ello- Ni sueñes que baje la música y menos si me lo pides tu –dicho eso me miró con una sonrisa triunfante y se metió en su habitación-

No pude mas, los nervios que había provocado en mí y la rabia que llevaba dentro no me dejaron ir de vuelta hacia mi habitación. Apoyé mis manos sobre el borde del balcón y dí un salto para pasar al otro balcón, se notó el ruido de mis converse en el suelo. Rápidamente me dirigí a su habitación y al entrar por el balcón el se quedo mirándome sorprendido y se levantó rápidamente del sillón que tenía en frente del televisor.

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