Justin separó nuestros labios y comenzó a besar mi cuello, con eso sentí algo que jamás había sentido, algo dentro de mí. Creo que era excitación. Justin seguía besando mi cuello y cada vez bajaba más, hasta que llego hasta donde empezaba mi camiseta. Entonces volvió a subir a mis labios. Y sus manos bajaron hasta mi cintura y subió mi camiseta asta debajo de mis pechos. Quedando mi vientre desnudo. Entonces volvió a separar sus labios de los míos, y bajo hasta debajo de donde había subido la camiseta y también comenzó a besar mi cuerpo hasta llegar a mi ombligo.

Tu: Justin…
Justin: ya se… quiere que pare. – dijo separando un poco su cuerpo del mío.

Por parte quería parar porque no estaba segura de estar preparada para dar ese paso, pero es que él lo hacía con tanta delicadeza, que parecía que fuera algo normal. Así que decidí decirle otra cosa de lo que tenía pensado.

Tu: no, quiero que sigas.
Justin: ______, estas segura? No quiero que te sientas presionada ni nada… - dijo mirándome a los ojos.
Tu: si, lo estoy. Sigamos.
Justin: está bien. Te amo ♥

Entonces él se quitó la camiseta, y quedó en bermudas. Después seguimos besándonos. Yo coloqué mis manos en su torso desnudo, y lo acaricié. Luego nos dimos la vuelta, yo quede encima de él. Justin comenzó a acariciarme la espalda y me dejo sin la camiseta.

Justin: que sexy te ves con esos shorts y en sujetador.
Tu: :$ Justin… otra vez queriéndome sonrojar?
Justin: ya sabes que me encanta.
Tu: pero a mí no me gusta ponerme roja.
Justin: pues deberías verte al espejo, el color rojizo en tus mejillas te queda muy… - entonces lo callé con un beso. Entonces él comenzó a bajarme el short que llevaba. Una vez me los quitó, nos besamos con más pasión. Hasta que algo nos interrumpió. Sonaba mi móvil. No le di importancia y seguí besándolo y acariciando su perfecto cuerpo.

Justin: - se separó unos centímetros – deberías cogerlo, puede ser importante.
Tu: No quiero. – dije dándole un beso fugaz.
Justin: - me cogió de la cintura y me separo de él – ves a cogerlo.
Tu: está bien…

Entonces me levanté de la cama y cogí mi móvil.

Tu: diga?
Xxx: HOLA ______! –gritó alguien desde el otro lado del teléfono.
Tu: Eva? – que hacia mi hermana llamándome tan tarde? Además en España eran unas siete u ocho horas más. Miré el reloj, marcaban 12 de la noche. – que haces llamando a estas horas?
Eva: es que te echo de menos… y quería hablarte para ver cómo te va.
Tu: sabes la hora que es aquí?
Eva: no, porque? Es muy temprano? O muy tarde?
Tu: te diré que son las 12 de la noche…
Eva: ups… lo siento. Aquí es bastante temprano las 7 de la mañana.
Tu: y que haces despierta tan temprano?
Eva: pues que no podía dormir…y tu como es que aun estas despierta?
Tu: pues que yo y Justin… estábamos… viendo una peli.
Eva: ah…y por lo demás que tal?
Tu: pues bien, estamos todo el día playa o piscina… o cosas así. Tu qué haces?
Eva: igual… a que no sabes ayer vino un chico a casa preguntando por ti.
Tu: que?! Un chico, dices?
Eva: ajá. Me dijo que era de tu cole o así. Y que quería quedar contigo. Y yo le respondí que estabas de viaje con un amigo.
Tu: te dijo su nombre?
Eva: mmm… creo que me dijo que se llamaba Marc. Quién es?
Tu: QUE!? MARC?! Es uno de mi cole…
Eva: eso ya me lo dijo… pero que es tu novio de aquí o algo?
Tu: - no, tonta. Es uno que casi me intentó violar; pero no le iba a responder eso. – no. Bueno si eso hablamos en otro momento.
Eva: esquivando el tema, eh!
Tu: Calla! Dile a mamá que la quiero.
Eva: está bien… y por alguna casualidad de la vida, este chico vuelve. Que le digo?
Tu: mmm… dile que quiere y como conoce donde vivo.
Eva: ok. Bueno buenas noches… y no hagas cositas con Justin…
Tu: yo no hago cositas con nadie…
Eva: ya, claroooo.
Tu: bueno Chao! Te quiero!
Eva: yo también!

Deje el móvil donde estaba y volví donde Justin. Estaba tumbado en la cama, casi igual que cuando me fui. Pero tenía su IPhone en la mano, seguramente Twitteando.

Tu: Ya volví. – dije sentándome en la cama, entonces él también se sentó.
Justin: ¿quién era?
Tu: mi hermana.
Justin: ¿y era importante?
Tu: bueno… me dijo que me extrañaba y que ayer un chico preguntó por mi…
Justin: ¿un chico? ¿Qué chico?
Tu: me dijo que no sabía el nombre.
Justin: ah… bueno… me ha extrañado que no me preguntaras por lo de Sheila…
Tu: es porque si tu no quieres contármelo no hace falta... a mí no me gusta que me presionen y decidí que si tú me lo quieres contar ya lo harás… no hace falta si no quieres.
Justin: la cosa es que quiero. Quiero que en nuestra relación haya sinceridad.
Tu: está bien. Cuéntame.
Justin: mira, como bien dije antes estábamos jugando a ese juego, y ella me dijo: “a que no te atreves a que hagamos sexo oral” y yo, fui un completo idiota, y me deje llevar y dije: “pues claro que me atrevo por quien me tomas?” entonces ya te imaginas lo que paso… pero solo fue sexo oral…

No me podía creer. Estaba furiosa, triste, decepcionada, muchas sensaciones corrían dentro de mi… ¿Cómo se supone que debía reaccionar ante eso? Me tenía que enfadar? Dejarlo pasar? En mi cabeza hay millones de preguntas.

Justin: estas bien, amor? Te has puesto muy pálida… Lo siento, de veras. Es que me deje llevar por el momento… la excitación y todo eso… perdóname.

¿Y yo que le respondo? “tranquilo Justin, no pasa nada” o quizás un “estúpido! Cómo pudiste? Confié en ti y me haces esto.” ¿Por qué me pasa esto?

Tu: …