Capitulo 53 FIN
By Unknown - 21:26
Miré
a Justin sorprendida al verle en la habitación y luego me di cuenta
de que no estábamos solos Miley, estaba detrás de Justin, justo en
la puerta escuchando y viendo todo lo que estaba pasando adentro. Me
sorprendí. ¿Que demonios estaba pasando? Había algo que no sabía
y me había perdido.
Jasmine:
Justin, yo .... lo siento mucho. Ella es la culpable! -me señaló
con su dedo mientras todas las miradas se dirigían a mi,
incomodándome- Ella tiene toda la culpa de lo que me esta pasando
-sus lagrimas caían por su cara-
Tu:
Yo no tengo la culpa de nada! Y tu lo sabes perfectamente! -le grité
furiosa-
Justin:
¿Que demonios esta pasando aquí? -nos miró a las dos a la vez-
Miley:
Lo que esta pasando aquí es que Jasmine esta obsesionada contigo y
lo único que quería hacer era apartarte a ti de ____ para salirse
con la suya. Ese hijo no es tuyo Justin. Escuchamos los dos lo que
Jasmine decía. Es de Cody. Ella misma lo dijo! -entro a la
habitación mientras Jasmine la fulminaba con la mirada-
Justin:
Es eso cierto Jasmine? -la miró con sus ojos mieles entrecerrados-
Jasmine:
Eso es mentira! Este hijo es tuyo Justin, por favor, me tienes que
creer. -le miró fijamente a los ojos mientras lágrimas se
deslizaban por su cara-
Miley:
Eso es mentira y tu lo sabes.
Jasmine:
-se apoyó en la pared mientras soltaba un gemido y su boca se abría
intentado coger aire. Nos miramos todos incrédulos por lo que estaba
pasando- Ah, me duele -se llevó la mano a su abdomen.
Justin:
Estas bien? -la sostuvo, con preocupación en su rostro-
Jasmine:
No. -dijo levantando su cabeza- Si algo le pasa a mi hijo, tu serás
la única culpable. -su voz era profunda, me miró mientras mis
lágrimas corrían por mis mejillas-
Miré
a Miley y a Justin al levantar mi vista. Esto había sido por mi
culpa. Me sentía la peor persona de estar tierra. Las lágrimas
caían por mis mejillas sin parar, no podía controlarlas. Empecé a
caminar para desaparecer por la puerta, encontrándome en el pasillo
a Ryan, incrédulo por la situación. ¿Porque todo esto me tenía
que pasar a mi? Simplemente le ignoré y empecé a correr como podía
por el pasillo intentando salir de ese lugar que se había convertido
en un infierno.
No
sabía ni a donde dirigirme, pero pronto encontré una puerta que
daba a un patio con escaleras, era la entrada, pero estaba desierta.
No había nadie. La noche había caído. Serían seguramente mas de
las 11 de la noche. El viento suave despejaba mi cara mientras
contenía mis lágrimas para que no salieran. Intentaba caminar por
el césped después de bajar las escaleras, había coches elegantes,
negros, aparcados en la entrada. Sentí como detrás de mi, gritaban
mi nombre.
-:
______! Espera! -no reconocía la voz, pero me era familiar, ni
siquiera me di la vuelta, solo caminé hacia adelante sin mirar
atrás-
Me
acerqué mucho mas a un coche que estaba aparcado, por suerte había
un señor de traje de corbata sentado en la parte del conductor. Abrí
la puerta para entrar adentro, ahora mismo no me importaba quien
fuese aquella persona, solo quería salir de aquí cuanto antes.
-:
Desea algo señorita? -me miró algo confundido-
Tu:
Puede sacarme de aquí? -le miré limpiando mis lágrimas de mis
mejillas-
-:
Por supuesto. A donde la llevo? -preguntó amablemente mientras
arrancaba el coche-
Tu:
A la Academia de música de Los Ángeles, por favor -sollocé de
nuevo mientras el sacaba el coche de su sitio aparcado y empezaba a
conducir por la calle-
-:
Esta bien? Quiere algo? -me preguntó mirando por el retrovisor, yo
negué con la cabeza intentando que me dejara de mirar cuanto antes-
Poco
mas de 20 minutos después pude ver a lo lejos la Academia mientras
nos acercábamos, suspiré con algo de tranquilidad en mi cuerpo. Por
fin estaba en el lugar en el que no me podrían molestar al menos
durante una hora. El coche negro paró justo en frente y abrí mi
bolso para darle algo de dinero por hacerme el favor de traerme. Pero
el negó con su mano y me miró sonriente, era agradable.
-:
Oh no, señorita -negó con su cabeza- Estamos a servicio de la
fiesta de la discográfica esta noche, no cobramos a las persona que
llevamos -sonrió amable-
Tu:
Vaya, gracias. -sonreí amable- Que tenga una buena noche. -salí del
coche mientras el me dedicaba una sonrisa cálida y tranquilizadora-
-:
Igualmente, y espero que este todo bien. -asentí con mi cabeza.
Tu:
Gracias -susurré mientras cerraba la puerta y me dirigía a la
entrada de la Academia a la vez que sentía el motor del Audi negro
alejarse por la calle-
Suspiré
mientras observaba la puerta de la Academia, pero mi bolso vibro
mientras me estremecía. Lo cogí torpemente después de rebuscar sin
parar en el interior. Era Miley, dos llamadas de Demi, una de Taylor
y un mensaje de Miley, recién recibido. “____, por lo que mas
quieras, contesta a las llamadas. Te iremos a buscar a la Academia.”
Ni loca voy a contestar a las llamadas y mucho menos voy a decir
donde estoy. Si piensan así, están muy equivocados. Mier*da, dijo
que van a venirme a buscar a la Academia? No, no puede ser. ¿Porque
demonios pasa esto? Negué con la cabeza mientras metía mi iPhone en
el pequeño bolso que llevaba. En la Academia no iba a estar eso de
seguro, no quería ver a nadie. Quería estar sola. Empecé a caminar
por la acera de la calle, estábamos en el centro de la ciudad.
Pasearía por la ciudad en la noche para despejarme. Estar sola era
lo que mas necesitaba y no ver a nadie era lo único que me
mantendría mejor. Todo había pasado por mi culpa ... Jasmine,
podría haberle hecho daño.
No
quería imaginarme nada mas. Las lágrimas caían por mis mejillas de
nuevo.
Miré
mi reloj de muñeca. Las 4 y media de la mañana. Era demasiado
tarde, llevaba horas y horas por las calles de Los Ángeles, pensando
demasiado. Mi iPhone había parado de sonar por fin, pero de nuevo
empezaba a vibrar con mensajes y mensajes. Poco quedaba para que
colapsara. Caminé de regreso a la Academia. A lo mejor ellos no
estaban allí. Aunque sabía en el único lugar en el que podría
estar sola, sin que nadie me molestara. Subí las escaleras, después
de entrar a la Academia sigilosamente. No se escuchaba absolutamente
nada, el silencio inundaba los pasillos. Quité mis tacones de mis
pies, quedándome descalza. Suspiré con alivio, me estaba muriendo.
Caminé hasta subir unas escaleras para llegar a la terraza de arriba
del todo de la Academia, allí se veía buena parte de la ciudad.
Estaría sola y nadie me molestaría.
Cerré
la puerta detrás de mi mientras caminaba bajo la luz de la luna a
través de aquel lugar al aire libre. Me asomé en el borde de la
terraza, mientras el aire era mas notable porque no había edificios
cubriendo el lugar. El viento cálido ondeaba mi cabello largo, mis
lagrimas ya eran imposibles de contener. Me derrumbé por completo
mientras me dejaba caer hasta chocar contra el suelo y sollozar a la
vez que envolvía mis brazos en mí misma. Si todo se acabara ahora,
no me importaría en absoluto. Pocos minutos después, le puerta se
abrió captando toda mi atención. Ví la silueta de una persona
acercarse a mi mientras el perfume me invadía por completo. Cerré
los ojos, algo aturdida por el momento y las emociones.
-:
Al fin te encuentro -dijo sonriendo un poco mientras se acercaba-
¿Puedo sentarme? -preguntó amablemente, yo asentí mientras se
sentaba a mi lado-
Tu:
¿Que haces aquí? -dije en un susurro, sollozando de nuevo sin poder
controlarlo-
Justin:
Te vi marcharte de la fiesta, pero te estabas montando en un coche
cuando te fui a buscar -se encogió de hombros-
Tu:
¿Como me encontraste? -esta vez me atreví a levantar mi mirada para
coincidir con sus ojos miel-
Justin:
Fue fácil. Te asomaste a la terraza y cuando venía te vi -sonrió
con esa sonrisa perfecta mostrando sus dientes blancos-
Tu:
Yo...lo siento por lo que...-me interrumpió-
Justin:
No digas nada, no tienes nada por lo que disculparte. En todo caso,
yo tengo que disculparme. Por todo lo que te hice sufrir, y por no
darme cuenta de lo que estaba haciendo Jasmine -las lágrimas
recorrían mi cara hasta llegar a mi barbilla- Porque no me dijiste
lo que ella te hacía y te decía?
Tu:
Porque...pensé que no me creerías. -agaché de nuevo la cabeza-
Justin:
Lo siento. -se disculpó en un susurro mirándome-
Tu:
¿Como esta? -me referí a Jasmine, sin poder mirarle a los ojos-
Justin:
Se la llevaron al hospital, no corre peligro, pero todo quedó claro.
-levanté mi cabeza asombrada-
Tu:
¿El que? -le pregunté esperando su respuesta-
Justin:
Que ella mentía. Llegó al hospital el hijo de pu*ta de Cody y el
reconoció todo. Casi me tienen que sacar del hospital por pegarle,
pero... -se encogió de hombros- No me importa -sonrió haciendo que
sonriera contenta, conteniendo mi sollozo- Miley, tiene fuerza. Si no
llega a ser por ella, hubieran metido a Cody en otra habitación
-reímos los dos por su comentario, mientras nos quedábamos mirando
a los ojos- Lo siento -susurró, acariciándome la cara con su dedo
pulgar-
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