{ Capítulo 11 }

By Unknown - 18:09



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Cómo diablos hiciste eso? —dije, mirando a la mesa en el
comedor. Esparcida sobre esta había montículos de mis
tostadas francesas favoritas, rellenas a rebosar de Nutella:,
picadillo de batata que hizo exactamente como lo hago yo, a pesar de
mis, a propósito, vagas y confusas instrucciones, y frutillas, que de alguna
forma había cortado y rellenado con crema batida a mano. Incluso había
encontrado champagne, e hizo mimosas.
—Soy un hombre de muchos talentos. Algunos están escondidos,
otros no. Tal vez, algún día, me dejes mostrar algunos de los escondidos. —
Estaba tan deslumbrada con la comida para hacer un comentario rápido.
—Santo cielo, hombre. No sabía que podías cocinar —dijo Renee,
saliendo de su habitación.
Darah ya había elegido su trabajo como asistente de recepción en
la Unión, y no estaría de vuelta hasta más tarde.
—Probablemente, deberíamos comerlo antes de que se enfríe.
Empiecen a comer, señoritas —dijo, alcanzándome un plato.
Definitivamente, había comida como para doce personas—. Espero que
no les importe, pero invité a Mase. Dev y Sean puede que vengan,
también.
Así que por eso había hecho tanto. No podía detenerlo por tener a
sus amigos aquí, realmente, pero no quería que nuestro apartamento se
convirtiera en una casa de fraternidad con latas de cerveza y chicas
extrañas escabulléndose fuera por las mañana luego de sus encuentros de
una noche en nuestro sofá. Ew y asco.

Nutella: es el nombre de un producto italiano de la firma Ferrero. Esta crema de avellana y cacao fue creada en :::: por Pietro Ferrero.


—Está bien por mí —dijo Renee, apilando su plato con frutillas y
crema, y un solo pedazo de tostadas francesas.
¿Qué tenían las chicas con el miedo de comer enfrente de otros
chicos? Nunca había tenido ese miedo, así que llené mi plato. Justo
cuando estaba por sumergir mi tenedor en la tostada y desatar la delicia
de Nutella, hubo un golpe en la puerta. Tenía que concedérselos, al menos
no irrumpieron en el apartamento.
Justin abrió la puerta, y Mase y Dev entraron.
—¿Qué estás haciendo? Huele fantástico —dijo Mase, caminando
directamente a la mesa con la comida.
—Hice esto a pedido de _____. Dudó de mis habilidades de cocina,
así que tuve que mostrarle de lo que estoy hecho.
—Nunca deberías dudar de Justin cuando alardea sobre algo. La
mayoría de las veces, si es malo en algo, ni siquiera va a hablar de ello. Si
está alardeando, significa que está diciendo la verdad —dijo Mase,
tomando un tenedor y moviendo tostadas hacia una servilleta.
—¿Quieres un plato? —pregunté.
—Nah, estoy bien así. Luego tendrás que lavar uno menos.
Qué considerado. Dev fue más precavido, preguntándome dónde
estaban los platos, y esperando a que todo el mundo estuviera servido
antes de tomar lo que sobró, lo cual no era mucho. Sean, siguió detrás de
él. No había sillas suficientes, así que nos acomodamos en el sofá y el piso
de la sala como anoche con la pizza.
Coros de “oh Dios mío”, “mmmh” y “querido dulce Jesús” fueron
entremezclados con ruidosas masticaciones y tragados. A parte de eso, la
conversación fue inexistente.
De acuerdo, de acuerdo, debía admitirlo. Justin la lanzó fuera del
parque. Las tostadas francesas eran una de esas comidas que parecían
simples de hacer, pero era increíblemente fácil echarlo a perder. Él había
sobrellenado el centro con tanta Nutella, que esta rebosó cuando la corté
con el tenedor, y se chorreó por mi mentón cuando la mordí. La limpié y
lamí mi dedo. Justin estaba observándome, esperando por mi reacción.
—Está bien, supongo —dije, cortando otro pedazo, llevándolo a mi
boca. Levantó sus cejas y tomó una mordida del suyo, masticando
lentamente.
::

Por Dios era como si hubiese muerto e ido al cielo de los desayunos.
Realmente esperaba que él no fuera a usar sus habilidades culinarias
como influencia para favores sexuales. Por esto, voy a tener que rendirme.
—Creo que debemos tener un brindis —dijo Renee, alzando su copa.
Bueno, en realidad era un vaso de plástico. Ninguna de nosotras había
traído copas de champagne cuando nos mudamos.
—Por los talentos escondidos —dijo ella.
Todos chocamos nuestros vasos. Justin me guiñó un ojo cuando las
nuestras se encontraron. Le arrugué mi nariz.
—Si ustedes, chicos, van a comer de esta forma todas las noches,
voy a tener que mudarme aquí —dijo Mase—. Lo único que tenemos es
palomitas de maíz para microondas, cerveza y pollo frito de hace una
semana que nadie recuerda haber comprado.
Me estremecí, también lo hizo Renee.
—Mi ex novio jamás surtía su refrigerador. Siempre tenía que llevar mis
propias provisiones cuando me quedaba allí —dijo Renee, enfatizando la
palabra “ex”. Como si nadie la hubiese captado.
—Creo que es algo de chicos —dije.
—No de todos los chicos —dijo Justin.
—Aparentemente, no —respondí.
Mi teléfono vibró con un texto de mi madre, y me excusé para hablar
con ella. Justin me lanzó una mirada cuestionadora, pero disqué llamar,
puse el teléfono en mi oreja y lo ignoré.
—¡Hola, Kid, tanto tiempo sin hablar! Creí que estabas en una zanja
en alguna parte —dijo, mientras tomaba asiento en mi cama para
conversar.
—Nop, lamento decepcionarte. Estoy viva y bien. Perdón por no
haberte llamado. Las cosas han estado un poco locas.
—¿Cómo te fue en la mudanza?
Le di un rápido resumen. Sentí como si tuviera que grabarme a mí
misma contando esa historia así podría reproducírsela a todo el que
preguntara. Dejé un montón de cosas sin contar cuando le di la versión de
mamá. No quería preocuparla. Siempre se preocupaba por mí más que
Tawny. No estaba segura si era porque era la más pequeña, o por mis
problemas. Quizás ambos.
::

—Oh, no. —Procedió a insistirme que fuera a la residencia y los
molestara. Le dije que eso era lo que había hecho, pero que no me había
llevado a ninguna parte.
—Bien, entonces llamaré y les daré un pedazo de mi opinión. Es
ridículo que no hagan nada al respecto. Sólo están siendo holgazanes.
Espera —dijo, y pude escuchar que me había puesto en altavoz así ella
podía buscar el número.
—Mamá, está bien. Yo me encargaré de esto. No tienes que pelear
mis peleas por mí.
—Pero soy tu madre. Siempre querré golpear la mierda de la gente
que es mala contigo.
—Nadie fue malo conmigo. Estoy bien. —Comencé a arrepentirme
de haberle contado. Mamá siempre intentaba compensar no haberme
protegido aquella única vez. Había estado haciéndolo desde que tenía
doce años, y no sabía cuándo iba a terminar, o al menos disminuir su
intensidad. La amaba más de lo que podía decir, pero no necesitaba que
luchara por mí.
—¿Estás segura? Sabes que puedo hacer que las cosas sucedan.
Era cierto. Esta mujer podía arreglar cualquier cosa hablando. Tenía
esta forma de hacer que las personas creyeran lo que ella quería que
creyeran. En otra vida, creo que había sido una abogada.
—Sé que puedes hacerlo, y te amo por eso. Pero simplemente tengo
que lidiar con esto, ¿de acuerdo? Qué tal si hablamos de algo más.
¿Cómo está el trabajo?
Se rehusaba a dejar el tema, pero lo hizo por mi bien. Hablamos por
unos minutos más mientras me contaba historias graciosas sobre sus
compañeros de trabajo o clientes algo tontos que no podían entender
cómo usar una tarjeta de débito. Ella había trabajado desde cajera hasta
convertirse en la gerente del banco. Hablé un poco sobre mis clases y le
conté sobre mi búsqueda de trabajo. Nada pesado, nada serio.
—Tu padre llamó hoy —dijo mamá, echando una nube negra sobre
nuestra conversación.
—¿Qué tenía para decir?
—No mucho, dijo que quería verte pronto.
Decía eso cada vez que llamaba. Mis padres se habían divorciado
cuando tenía trece años, y él vivía en Connecticut ahora, lo cual no era
::

suficientemente lejos, en mi opinión. Llamaba de vez en cuando, pero
siempre borraba sus mensajes de voz.
—Estoy segura que sí.
—Deberías ir y verlo. Sé que te extraña.
—Si me extrañara, vendría a verme.
—Lo sé, pequeña, lo sé. —Suspiró, y enredé un dedo en mi cabello.
—Escucha, te llamaré este fin de semana para poder hablar más,
¿de acuerdo?
—Bueno, pequeña. Te amo.
—Yo también, te amo.
Colgué y me recosté de nuevo en mis almohadas, cerrando los ojos.
Un pequeño golpe en la puerta me hizo volver a sentarme. —¿Qué
quieres? —Sabía que era Justin. La puerta se abrió, y asomó su cabeza.
—Sólo quería dejarte saber que los chicos se han ido, Renee fue a la
biblioteca a leer, así que si quieres algo de privacidad no tienes que
esconderte aquí.
Renee ya tenía una cantidad impresionante de libros para leer,
desde que se especializaba en enfermería. También tenía una enfermiza
obsesión con las descripciones sangrientas de las enfermedades.
—¿Dónde vas a estar? —dije.
—¿Dónde quieres que esté? —Me sonrío con satisfacción.
—Dónde sea que yo no esté —dije, levantándome de mi cama y
caminé evitándolo hacia la sala. No tenía que hacer deberes con
urgencia, así que decidí tomar el libro del que él, tan groseramente, me
había distraído esa mañana.
Saqué mi e-reader y me senté en el sofá. Tuve que usar mi mano
izquierda para sostenerlo, porque la derecha todavía dolía del encuentro
con la cara de Justin. Probablemente, debería ponerle algo de hielo pero
no quería darle esa satisfacción.
La cocina estaba inmaculada, los platos estaban ya en el escurridor
y toda evidencia del buffet de desayuno había desaparecido. Darah no
había tenido la oportunidad de hacer nuestra tabla de tareas, pero estoy
segura que trabajaba en ella.
—¿Te importa si toco?
—No, adelante —dije, sin alejar la mirada de mi libro.
::

Se dirigió a nuestra habitación, volviendo con su guitarra. No la había
mirado muy bien el día anterior, pero definitivamente tenía sus años. Era
negra, pero abollada y rayada por todas partes. Tomó asiento en la silla
frente al sofá y acomodó la correa alrededor de su cuello. Seguí leyendo,
pero esperé que comenzara.
—¿Pedidos?
—Creí que tenía que pagar por ellos —dije.
—Me siento generoso. Te daré algunos de obsequio.
—Qué generoso —Tocó una cuerda. Lo pensé por un segundo—.
Smooth Criminal. Cualquier versión.
Pareció sorprendido por un momento, y luego comenzó a tocar. No
pude evitar y moverme con el tema familiar. Contra mi voluntad, mi
cabeza se movió y mis pies se sacudieron. No cantó, pero tocó la canción
pero eso era suficiente. Era muy talentoso. Cuando la canción terminó,
continuó tocando un sonido transicional.
—¿Siguiente?
—On My Own. —No había forma de que supiera esa. Había tenido
una breve obsesión por los musicales en la secundaria, y tuve un pequeño
papel como parte de la producción comunal de teatro de Les Miserables.
Había querido, más que nada, ser Eponine, pero había demasiadas chicas
presentándose para el papel que habían estado en el teatro desde que
nacieron, así que no obtuve el papel. Estuve un poco deprimida por al
menos un mes.
—Crees que vas a desconcertarme, pero te puedo asegurar que
puedo tocar prácticamente todo —dijo antes de lanzarse a tocar la
versión en guitarra de la canción.
Honestamente, creí que incluso si la sabía, no sería capaz de tocarla
en la guitarra. Había demostrado que estaba equivocada de nuevo.
Todavía sostenía mi e-reader, pero el libro no era tan atrapante como
Justin.
Se perdió en la música, lanzando todo su cuerpo en la canción.
Lucía como si ni siquiera fuera consciente de lo que hacía, simplemente se
perdía en la música. Verlo era hermoso. Justin tocó con todo lo que tenía,
y era bueno. No, no era bueno. Era increíble. Hipnótico. ¿Podría ser este
chico el mismo que me dijo que era material para acostarse anoche?
Abruptamente, terminó la canción, colocando su mano sobre las cuerdas
para que dejaran de vibrar.

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6 comentarios

  1. holaaaaaaaa *u* soy nueva reader :3 ES MUUUUUUUUUUUUYYYYYY, MMMMMMMUUUUUUYYYYYY HERMOSA, PRECIOSA, INDESCRIPTIBLE :B seguilaaaaaa porfavorr :3

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    1. Holaaaa !! HOY NOMAS LA SEGUIRÉ !! SIENTO HABER TARDADO JAJAJA Y BIENVENIDA !!!

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  2. siguee siguee sigueeeeeeeeeeeee
    esta super chiidaa *u* me henamoree de la noveeeeeeeeeee!
    TAN TAN TAN... oye cuandoo laa siguess??
    porque nunca respondes los commenterios???
    atte:Yooo!!

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    1. Jajajajaja que onda wey !! (Siempre quise decir eso jaja) gracias por el comentario jajaja hoy la seguiré cuándo pueda y ....los comentarios porque no contesto básicamente por el tiempo jajaja si tardo en subir cao imaginate para contestar comens hago lo que puedo y sigo por vosotras/o muchísimas gracias por todo y prometo comentar más pronto (he puesto mucho comentar jajjaja)

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  3. Cada dia que pasa me gusta mas!! A ver si puedes subir hoy caps que ya estoy impaciente por seguir leyendo. Besitos :)

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    1. Holiii !!! Lo sientoooooooooo muchísimo por no haber subido antes es que he tenido muchas cosas que hacer muchas muchassssssssssssss jajaja hoy.. sábado 12 he vuelto de Italia y me he puesto como loca a subir porque llevaba casi 2 semanas desaparecida y sin comentar OMG jaja lo siento mucho no tengo excusa PERO TIENES MARATÓN DE 10 CAPITULASHOS Grr jaja gracias por tu comentario.

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