Chapter ♥ {23}
By Unknown - 12:53
- Agárrate - cogió mis manos y las puso alrededor de su cintura. - Vamos allá - arrancó la moto.
La moto empezó a moverse. Cogimos por la avenida, hacia la carretera que daba al pueblo de al lado.
Cuando salimos de la ciudad y cogimos la autopista, Justin aumentó la velocidad, y metí mis manos en los bolsillos de su chaqueta.
Llegamos al pueblo de al lado y Justin metió una de sus manos en su bolsillo.
Agarró como pudo mi mano. Cuando el semáforo se puso en verde, sacó la mano y volvió a conducir.
Me encantaba la sensación de ir en moto. Justin se paró en frente de un bar.
Agarró como pudo mi mano. Cuando el semáforo se puso en verde, sacó la mano y volvió a conducir.
Me encantaba la sensación de ir en moto. Justin se paró en frente de un bar.
Apagó la moto y se quitó el casco y yo me quité el mío. Justin se bajó y me ayudó a bajarme. - Espera aquí - dijo dándome el casco - tengo que hacer una cosa.
- Vale, no tardes por favor - dije mirando a mis alrededores.
- No lo haré - me guiñó un ojo. Justin se perdió entre las puertas de ese bar.
Sonreí y me apoyé en la moto. Un coche de policía paró justo delante de la moto de Justin.
Esto empezaba a olerme mal, saqué mi móvil y marqué el número de Justin. No me lo cogió. Los policías entraron al bar. Marqué de nuevo el número de Justin, no me lo cogió. Tenía un mal presentimiento. Justin salió a toda prisa, pero sin correr.
- Vámonos - asentí. Los policías salieron.
- Vaya Bieber - dijo uno de los policías - No sé cómo te las apañas, pero siempre coincidimos.
Esto empezaba a olerme mal, saqué mi móvil y marqué el número de Justin. No me lo cogió. Los policías entraron al bar. Marqué de nuevo el número de Justin, no me lo cogió. Tenía un mal presentimiento. Justin salió a toda prisa, pero sin correr.
- Vámonos - asentí. Los policías salieron.
- Vaya Bieber - dijo uno de los policías - No sé cómo te las apañas, pero siempre coincidimos.
- Pura casualidad - dijo este. Los miré confusa.
- Ya te pillaré.
- Tú lo has dicho, ya me pillarás. - sonrió vacilante.
- Estoy esperando el más mínimo error para meterte entre rejas - soltó. Justin me quitó el casco de mis manos y me lo puso.
- Suerte en tu propósito. - me ayudó a subir en la moto. Se puso su casco y subió.
- Ya verás Bieber. - Justin arrancó y dejamos a la policía detrás, ¿A que había venido eso? ¿Es que Justin había tenido problemas con la ley? ¿Para que quería Justin entrar en ese bar?
Moví la cabeza confusa. Ya le abordaría a preguntas cuando paráramos. Aunque seguramente, él no me dirá nada, ya que no suele responder a las preguntas que le hago, siempre responde con un “no te interesa” .
Llegamos a casa, Justin aparcó la moto en el garaje y me ayudó a bajarme, me quité el casco, ahora empezaba mi turno.
- ¿Que fue eso? - le pregunté.
- ¿El qué? - dio indiferente.
- Lo del bar, la policía, ¿A que se refería? - dije siguiéndole, ya que había empezado a andar y me había dejado detrás.
- Nada.
- Claro que no, ¿Por qué no me lo dices? - desesperé.
- Porque no… - lo interrumpí.
- Te interesa - terminé la frase. - Pero, eh Justin, joder, no andes tan rápido. Entramos en el ascensor. - Escúchame - lo amenacé con el dedo - Si, me interesa. Porque tengo que saber con quién estoy juntándome.
- ¡¿Quieres callarte?! - me gritó molesto. Fruncí el ceño y me crucé de brazos. - Eres demasiado preguntona - bufó.
- No soy preguntona, solo quiero saber si eres una mala influencia - solté. Las puertas se abrieron y salí del ascensor. Justin me cogió por el brazo y me giró para que lo mirara.
- ¿Mala influencia? - rió cínicamente - Cariño, nunca te dije que fuera un ángel. ¿O es que pensabas que lo era?
- No
- Entonces, no hay nada más que hablar.
- Averiguaré quien eres - dije soltándome de su agarre.
- Buena suerte en tu búsqueda, aunque te diré que no deberías hacerlo.
- ¿Por qué?
- ¿Que te he dicho de las preguntas? - soltó mi brazo y empezó a caminar hacia su puerta.
- Eres tonto - dije frustrada. - ¿Por qué no me respondes?
- Porque no quiero.
- Tengo derecho a saber, ¿Por qué quieren cogerte? ¿Qué hiciste? ¿Qué haces? ¿Eso tiene que ver a lo que te dedicas? - hablé rápido. - Eres bastante confuso - gemí.
- ¿Conoces lo de “Carpe Diem”?
- Si.
- Bien nena, aplícatelo. No preguntes, no te comas la cabeza. Solo disfruta. - no me había dado cuenta de que Justin había cogido mi mentón y me miraba sonriente, cerca, muy cerca.
- Sigues sin convencerme.
- Bueno, averigua lo que quieras sobre mi, no creo que encuentres nada en google. - me soltó.
- Buenas noches ____ - sacó sus llaves del pantalón y entró en su casa. Llamé al timbre y mi madre no tardó en abrirme.
- Bueno, dime, ¿donde habéis estado?- me preguntó.
- Dando una vuelta - me apoyé en la encimera.
- Sácame una zanahoria y una cebolla - me ordenó. Me dirigí al frigorífico y lo saqué.
- Y bueno, ¿ya hubo besito? - me sonrió abiertamente.
La miré confusa y reí. - No mamá, no hubo besito, que pesada!
Ella rió - ¿Como que aun no hubo besito!? -
- Bueno hoy no - sonreí tímida.
- O sea ¿ya se dieron un beso? - mi madre abrió su boca. -¿Cuando? ¿Dónde? ¿Cómo fue?
- No voy a contarte nada - volví a reír. - Son mis cosas - puse mis manos frías en mis mejillas, ya que las sentía arder.
- Bueno, ¿besa bien? - me miró divertida
- ¡MAMÁ! - dije tirándole un paño.
- Vale, vale - rió tirándome el mismo paño. - ¿Te gusta? - cortó la zanahoria.
- Bueno, es guapo - sonreí de lado - y muy simpático.
- Si, se ve un buen chico.
- Si… - me quedé pensando - Aunque oculta algo- murmuré para mi misma.
- ¿Qué? - preguntó mi madre.
- Nada mamá, voy a ponerme el pijama. Me encerré en mi habitación. Saqué el móvil del bolsillo y llamé a mi padre. Lo puse en modo altavoz, lo dejé encima de la mesa y mientras que hablaba iría cambiándome.
- ¿Si?
- Hola papá. – me quité mis zapatos.
- Hola cariño, ¿Cómo estás?
- Muy bien ¿Y tú? – me desvestí.
- Estoy bien, ahora tengo turno de noche, así que voy camino a la comisaría. ¿Y tú?
- Hoy he tenido un examen, me ha salido mejor de lo que esperaba. – terminé de ponerme el pijama.
- Eso está bien, a ver si lo apruebas.
- Espero - murmuré. Terminé de ponerme el pijama. Cogí el móvil, le quité el altavoz y lo puse en mi oreja. - Papá, ¿Podrías buscar información de alguien? - le pregunté.
- Claro, ¿Quién es?
- Es un nuevo amigo, y quiero saber si ha estado metido en algún lio, tu me entiendes - mordí mi labio.
- Claro, esta noche te busco lo que sea, dime el nombre.
Sabía que me estaba metiendo en terreno peligroso, pero ya que mi padre era policía, aprovecharía. – Justin Bieber – dije. Mi padre se quedó en silencio al otro lado de la línea. Fruncí el ceño - ¿Papá?
-No es un buen amigo, ____, él está metido en el tema de drogas desde hace unos años. – Abrí mi boca en forma de O y todo me cuadró.
2 comentarios
DD: ya he descubierto a que se dedica Bieber, aunque ya lo sabía desde hace algunos capítulos...pero no importa, ahora lo he descubierto jaja.
ResponderEliminarSube otro capítulo, por favor, por favor, por favor, si no quieres ser la culpable de que mis uñas desaparezcan de la emoción D:
Iba a comentar ayer, pero el internet estaba taaaaaan lento que no me permitía comentar :cc
jajajajaja no te preocupes !! gracias por el comentario uuh justin malote hace cosas malotas, vende y compra y roba polvos blanquitos para ir a narnia e.e
Eliminar